Empezamos el año con nuevos propósitos, y muchos de ellos van relacionados con la salud.

Queremos cuidarnos y velar por nuestro bienestar general.

Nos preocupa la glucosa, el colesterol, la tensión, el sobrepeso…

Y ahí podemos hablar de El Síndrome Metabólico

INNOVACIÓN DE CONCEPTO

Con el término «Síndrome Metabólico» se hace referencia a una condición clínica compleja caracterizada por una circunferencia abdominal elevada y por la asociación de alteraciones del metabolismo de glúcidos y lípidos, que representan un factor de riesgo para diabetes y enfermedades cardiovasculares.  

Estas alteraciones son causadas por un conjunto de factores modificables y no modificables, como: una alimentación rica en grasas saturadas y en alimentos de alto índice glucémico, un estilo de vida sedentario, predisposición a la diabetes, colesterol y triglicéridos e hipertensión, alteraciones de la microbiota intestinal, predisposición genética y obesidad.

Parametros sindrome metabolico
Parametros sindrome metabolico

Justamente, la obesidad representa la primera señal de alarma para identificar el Síndrome Metabólico, sobre todo, si se observa un aumento de la circunferencia abdominal. 

Esta condición puede favorecer la aparición de la resistencia la insulina, que determina el aumento tanto de la producción de glucosa por parte del hígado, como una mayor producción de triglicéridos y colesterol.

No se presenta de repente, sino que es la punta del iceberg de un proceso fisiopatológico progresivo que es provocado por una alimentación incorrecta, vida sedentaria, estrés y todos los factores predisponentes antes mencionados.

 

 

 

 

Aunque este estado de estrés metabólico involucre a todo el organismo, se expresa a través de la alteración de algunos parámetros metabólicos (circunferencia abdominal, triglicéridos, colesterol, presión arterial), que conciernen a zonas anatómicas bien definidas:

  • Intestino, a nivel del cual se observa un estado inflamatorio que provoca un aumento de la permeabilidad intestinal y alteraciones de la microbiota.
  • Páncreas, 
  • Hígado, afectado por la inflamación, estrés oxidativo e insulinorresistencia.
  • Muscular‐esquelético, se observa una pérdida progresiva de masa magra.
  • Tejido adiposo, hipertrofia e hipoxia de los adipocitos.
  • Sistema cardiovascular, afectado por infiltración de colesterol.

Entre estos, el eje intestino‐hígado se distingue como el auténtico protagonista en la gestión del metabolismo. 

Todo inicia a nivel intestinal, donde los nutrientes provenientes de la dieta se digieren, se absorben y se eliminan. 

En todos estos procesos, la MICROBIOTA INTESTINAL ejerce un rol fundamental, como un auténtico órgano metabólico, que a su vez es capaz de favorecer el uso, la acumulación o la eliminación de los nutrientes. 

En condiciones normales, la microbiota vive en simbiosis con el organismo humano y ejerce importantes funciones:

  • Coadyuva la digestión y la absorción de nutrientes 
  • Sintetiza algunas vitaminas, como la vitamina K;
  • Produce ácidos grasos, importantes para la integridad de la barrera intestinal.

Algunos factores, sin embargo, como una alimentación rica en grasas y carbohidratos, pueden alterar la composición de la microbiota y favorecer el crecimiento de algunos grupos de bacterias en perjuicio de otros. 

El desequilibrio de entre estos grupos de bacterias promueve una excesiva absorción de los nutrientes, en particular de las grasas, y la liberación de sustancias inflamatorias.

Todo esto se traduce en niveles alterados de colesterol, triglicéridos y glucemia, y elevada circunferencia abdominal, signos identificables del Síndrome Metabólico.

Por ello decimos que, el Síndrome Metabólico es el final de un proceso de alteración, que de un único parámetro alterado conduce a varios desequilibrios metabólicos hasta llegar, con el paso del tiempo, al Síndrome Metabólico propiamente dicho.

Evolución alteraciones metabólicas

 

La presencia de una o varias de estas alteraciones en la población se encuentra, muy difundida y, lamentablemente, el Síndrome Metabólico se está propagando rápidamente también en edad pediátrica y en los adolescentes.

Debemos ser conscientes de la importancia de una vida saludable, basada en una dieta sana y ejercicio físico adecuado. 

En el caso de que esta opción no fuese suficiente…

Aboca innova en el mercado de las alteraciones metabólicas, con Metarecod: 

un producto natural y biodegradable al 100 % que permite actuar al mismo tiempo sobre uno o más parámetros metabólicos alterados, hasta el Síndrome Metabólico, promoviendo el reequilibrio del metabolismo con una excelente relación beneficio-riesgo tanto para el hombre como para el medioambiente.

Siendo perfectamente compatible con la medicación prescrita por nuestro médico.

INNOVACIÓN DE PRODUCTO

Contiene NeoPolicaptil Gel Retard, un complejo molecular de macromoléculas polisacarídicas de Avena, Glucomanano, Nopal y Mucílagos de Lino, Tilo y Altea. 

Su especial composición lo hace rico en fibras solubles (constituidas por mucílagos, pectinas, inulina y glucomanano) y en fibras insolubles, obtenidas principalmente de la fibra de avena.

Esta deriva de la parte más externa del grano de avena, o sea, el tegumento, que presenta fibras insolubles en porcentajes incluso superiores al 80 % y que cuentan con una elevada capacidad de unirse con el agua.

Ejerce una triple acción:

  1. ACCIÓN ANTIOXIDANTE
  2. ACCIÓN HIPOGLUCEMIANTE
  3. ACCIÓN HIPOCOLESTEROLEMIANTE

La fibra insoluble de avena presente en Metarecod es 100 % natural. 

Aboca, ha seleccionado la fibra insoluble de avena de Grain Millers,

La fibra insoluble de avena de Grain Millers, se obtiene a través de procesos de producción que no prevén la utilización de productos químicos y que no tienen un impacto ambiental negativo; al mismo tiempo, permiten preservar los fitonutrientes endógenos de la fibra, es decir, toda la lignina y los otros componentes naturales de la planta en bruto, de los cuales se mantienen su función y sus beneficios fisiológicos.

Gracias a esta peculiar composición, NeoPolicaptil Gel Retard, al entrar en contacto con una solución acuosa, forma un gel homogéneo y estable.

El gel se forma gradualmente y tiene una viscosidad particular, que permite una mejor fluencia en el tubo digestivo: esto reduce la probabilidad de percibir hinchazón o sensación de pesadez, mejorando así el cumplimiento del tratamiento. 

Además, el gel tiene una mejor capacidad de interacción con todos los componentes del intestino: el quilo (o sea, el contenido intestinal), la microbiota y el epitelio intestinal. 

Una vez estructurado en el aparato digestivo, permanece estable a lo largo de todo el tracto gastrointestinal garantizando una mayor constancia en la actividad.

La formulación tiene un sabor agradable gracias al polvo de hojas de Stevia, seleccionada como aromatizante funcional que:

  • es natural y confiere un sabor dulce;
  • es adecuado incluso en caso de diabetes;
  • tiene conocidas propiedades antidiabéticas intrínsecas, ya que es capaz de proteger las células beta del páncreas cuando están expuestas a daños por exceso de glucosa y ácidos grasos, conservando así su correcto funcionamiento.

Por último, natural y biodegradable al 100 %, Metarecod no contiene sustancias de síntesis, semisíntesis o genéticamente modificadas. Además, no contiene azúcares añadidos ni edulcorantes de síntesis.

MECANISMO DE ACCIÓN

Gracias al conjunto de todos los componentes de su fórmula, Metarecod es capaz de inducir una mejora metabólica profunda y sistémica con un mecanismo de acción fisiológico que actúa en primer lugar en el intestino y, por reflejo, en el hígado.

Metarecod restablece la composición fisiológica de la microbiota y, en consecuencia, recodifica la expresión génica del hígado, que recupera así su capacidad de coordinador metabólico.

Además, en Metarecod se pueden reconocer otros mecanismos de acción, complementarios a su acción primaria directa sobre la microbiota y a nivel hepático, que favorecen la regulación del pico glucémico y lipémico, el secuestro de los ácidos biliares y la mejora del tránsito intestinal. 

En particular:

  1. Favorece el control del pico glucémico y lipémico posprandial, modificando las características físicas del contenido intestinal y disminuyendo la concentración de grasas y carbohidratos. De esta forma, hace más gradual la absorción de estas sustancias (efecto retard), reduciendo al mismo tiempo también la cantidad total absorbida.
  2. Normaliza el tránsito intestinal para evitar la excesiva permanencia y el posible estancamiento de las heces: limita de este modo la producción de sustancias inflamatorias y contribuye a la eliminación de grasas (colesterol y triglicéridos) y carbohidratos (entre ellos, la glucosa).
  3. Secuestra los ácidos biliares, ya que reduce la reabsorción intestinal, contribuyendo a reequilibrar los niveles de colesterol circulante y reduciendo la cantidad de colesterol endógeno.

La ingesta del producto debe ir acompañada de un estilo de vida sano que incluya una alimentación equilibrada y una actividad física regular, principios fundamentales del tratamiento comportamental para el Síndrome Metabólico.

Metarecod puede aconsejarse EN COMBINACIÓN CON LOS FÁRMACOS

  • CON PRESCRIPCIÓN PARA EL COLESTEROL, LOS TRIGLICÉRIDOS Y LA GLUCEMIA: la asociación con Metarecod es posible solo bajo control médico.
  • CON PRESCRIPCIÓN PARA LA PRESIÓN ARTERIAL: la asociación con Metarecod es posible para tratar otros posibles parámetros alterados y para prevenir el surgimiento del Síndrome Metabólico.

EFICACIA CLÍNICAMENTE PROBADA

La eficacia de Metarecod para regular al mismo tiempo varios parámetros alterados3 ha sido demostrada por 7 estudios clínicos, llevados a cabo en más de 500 pacientes entre adultos y niños en centros hospitalarios de excelencia.