El uso de lubricantes sigue siendo todavía una incógnita para muchas de nosotras. 

¿Cuándo debo utilizarlo? ¿Me lo tengo que aplicar solo yo o también mi pareja? 

¿Qué otros beneficios tienen?

Si alguna vez te has preguntado cuándo es apropiado utilizar lubricante o cómo elegir el adecuado, intentaremos ayudarte.

Cuándo usar un lubricante:

Si experimentas molestias durante las relaciones sexuales debido a la sequedad vaginal o una disminución en el deseo sexual, no estás sola. 

Estudios clínicos revelan que una gran cantidad de mujeres experimentan estos problemas. Un lubricante puede ser tu aliado en estos momentos, facilitando la penetración, reduciendo la fricción y proporcionando una experiencia íntima más placentera. No solo se limita a la penetración, también puedes usarlo durante los juegos previos, masajes o con juguetes sexuales.

Cómo escoger el lubricante correcto:

La variedad de lubricantes en el mercado puede resultar abrumadora, pero dos características clave a tener en cuenta son el pH y la osmolalidad (nivel de concentración de partículas disueltas en el líquido). 

Para uso vaginal, busca un lubricante con un pH alrededor de 4.5 y entre 5.5 a 7 para uso anal. La osmolalidad debe situarse en torno a 380 Osm/Kg según la OMS para minimizar el riesgo de irritación. 

Evita aquellos que contengan sustancias nocivas como parabenos, colorantes o alérgenos. 

Algunas de nuestras recomendaciones:

El gel lubricante vaginal Mucus de Cumlaude es una excelente opción, formulado con ingredientes hidratantes que imitan el moco cervical femenino.

Si prefieres sensación de calor prueba Ginesens Lube, de base acuosa.

Otra opción pueden ser los lubricantes Lubets.

Todos ellos puedes consultarlos en nuestra farmaciaonline.

Cómo usar el lubricante en tus relaciones sexuales:

El lubricante puede transformar tus experiencias íntimas. No te limites a la penetración; intégralo en juegos previos y masajes eróticos. 

Algunos lubricantes ofrecen efectos de calor, frío o vibración, permitiéndote explorar nuevas sensaciones con tu pareja.

Los de base acuosa o silicona se aconsejan para relaciones sexuales con preservativo, ya que estos compuestos no deterioran el látex, a diferencia de los de base oleosa.

Aunque los preservativos ya suelen contener algo de lubricante, en ocasiones, y sobre todo en las mujeres que experimentamos mayor sequedad vaginal, se puede añadir un extra de lubricación mediante un gel lubricante en el exterior del condón para evitar la fricción y las molestias.

Compatibilidad del lubricante con preservativos:

Es crucial seleccionar un lubricante que no afecte la integridad del preservativo.

Los lubricantes a base de agua o silicona son ideales, ya que no deterioran el látex, (a diferencia de los de base oleosa). 

Agregar un extra de lubricación con un gel en el exterior del condón puede ser beneficioso, especialmente para aquellas mujeres con una mayor sequedad vaginal, evitaremos la fricción y las molestias.

Lubricantes y búsqueda del embarazo:

Si estás buscando concebir, opta por lubricantes a base acuosa, ya que son más respetuosos con los espermatozoides. Evita los de silicona u oleosos. 

Después del embarazo, los lubricantes pueden ser tu aliado para recuperar el deseo sexual, ya que la zona vaginal puede estar resentida.

En resumen, los lubricantes no solo mejoran el placer y facilitan el orgasmo, sino que también fomentan la experimentación y reducen los problemas de sequedad íntima. 

¡Atrévete a incorporarlos y disfruta aún más de tu vida sexual!

Fuente del artículo

Blog Cumlaudelabs

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